El surgimiento del periodismo moderno en Chile, a comienzos del siglo XX, vio el nacimiento de una serie de revistas especializadas dirigidas a distintos segmentos de la sociedad. Uno de estos segmentos fue el público infantil, para el que se publicaron varias revistas tales como la Revista de los Niños (1905), Chicos y Grandes (1908) y El Peneca (1908), con el fin de entretener y educar. De estas tres, El Peneca, creada por la editorial Zig-Zag, fue la única revista capaz de mantenerse vigente, tanto por la calidad de sus contenidos, como por la relación cercana que mantuvo con sus pequeños lectores.