COLLIPULLI.- Cuando Collipulli empezaba a emplazarse sobre el Malleco, a comienzos del siglo pasado, surgió la necesidad de hombres decididos y valientes de crear una institución que de forma noble, tenaz y sincera combatiera las tragedias que traía el fuego sobre los inmuebles de la comunidad.
En 1916, cuando habían pasado 36 años de la inauguración del Viaducto del Malleco, Arquímedes Bagolini, quien junto a familiares que habían llegado desde Italia para trabajar en la emblemática construcción, decidió, junto con otros hombres como José Stagno Fulle, Rafael Vallebuona, Angel Besazza, Dino Stagno y tantos otros, crear la Primera compañía en consideración a los siniestros que por la época ocurrían.
«El primer director fue precisamente Bagolini y curiosamente el nombre no se debe a él, sino a Manuel Bunster, uno de los propietarios, descendientes de dueño del Molino El Globo, que por aquellos años donó el terreno y de su pecunio también construyó el primer cuartel.-
Hoy 16 de marzo, la Primera Cía. de Bomberos Manuel Bunster cumplirá 105 años de incansable labor en favor de los habitantes de Collipulli y la zona.-
Son 105 años de entrega, de sacrificio y de amor hacia el prójimo, pues no solo se ha salvado bienes muebles e inmuebles, también se ha salvado vidas humanas, atendiendo todo tipo de emergencias; el fuego, el agua y los accidentes, como asimismo otros servicios los voluntarios primerinos siempre han estado dispuestos a combatir con esmero y profesionalismo.-
La comunidad collipullense ve en Bomberos a gente de valor y entrega desinteresada, que no trepidan en darse con absoluta generosidad hacia quienes se sienten vulnerables y en peligro, cuando las circunstancias acechan.-
Vaya hoy un recuerdo para los fundadores, para aquellos que sembraron en Collipulli la semilla del servicio libre y voluntario; pero ese homenaje también se traduce en honor y gloria para quienes siguen aquella senda, para hombres y mujeres que hoy forman en las filas de la Primera Cía. Manuel Bunster; homenaje a los que ya partieron; saludo además para quienes, no retirados, pero en el merecido descanso, como lo son los voluntarios insignes y los honorarios, pues ellos vibran igual que los jóvenes de hoy, con la manifestación del servicio y con la insignia en sus corazones del deber cumplido y haber dado paso a las nuevas generaciones que hoy enaltecen la sagrada misión de servir, servir siempre al prójimo y ante cualquier embate de la vida.-
A la Primera Cía., a sus directivos, voluntarios y voluntarias, nuestro saludo y adhesión en estos 105 años de servicio.-
