La Intendenta de La Araucanía, Nora Barrientos Cárdenas, junto al Seremi de Gobierno Ernesto Paillán, presentó durante esta jornada al nuevo Encargado de la Unidad Regional SUBDERE, el ex alcalde de Collipulli Leopoldo Rosales, quien asume el cargo que precisamente ocupaba la actual jefa regional.
Se trata de un profesional de amplia experiencia de servicio público y, particularmente, en el ámbito municipal, que tendrá como tarea principal evaluar y supervisar los distintos proyectos SUBDERE en ejecución en las comunas de La Araucanía y terminarlos de buena forma.
En la ocasión la primera autoridad regional se refirió a distintos temas regionales, entre ellos, los alcances del Fondo de Recuperación Productiva para Víctimas de violencia rural en La Araucanía por 3 mil millones de pesos, señalando que esta es una política del Gobierno de la Presidenta que tiene por objetivo recobrar una actividad afectada por hechos violentos. “Este fondo busca colaborar con las empresas o emprendimientos afectados para que puedan recuperar sus medios de producción y vuelvan a generar condiciones en materia de generación de empleo y de ingresos, apoyos que se materializarán a través de Corfo y Sercotec”, explicó Barrientos.
Agregó que la nómina de personas afectadas las entregan las Intendencias de La Araucanía y las dos regiones contiguas, a través de un procedimiento que coordina la Subsecretaría de Prevención del Delito y que requiere de un análisis jurídico-económico de los emprendimientos o empresas afectadas y en función de eso se resuelve si aplica este instrumento de recuperación productiva.
Respecto de la propuesta del diputado Felipe Kast, de crear una especie de “Informe Rettig” de casos de violencia en La Araucanía, la jefa regional descartó la idea por tratarse de temáticas diferentes. “Nos parecen gravísimos los hechos de violencia que ocurren, pero lo del diputado es una sobrerreacción y claramente no es comparable las víctimas de violencia rural con casos de violaciones de derechos humanos que son delitos de lesa humanidad cometidos por el Estado en período de dictadura, y lo primero que debería pasar es dar respuesta a las familias de la región cuyos miembros aún permanecen desaparecidos”.-