El espacio público se llenó de alegría y ritmo gracias a las dinámicas coreografías lideradas por el profesor Erwin Fuentealba, quien puso a bailar a todos los presentes al compás de animadas canciones. La actividad no solo fue una instancia de diversión, sino también una oportunidad para reforzar la importancia del ejercicio físico como parte del bienestar integral, promoviendo hábitos saludables entre niñas, niños y adolescentes.